No más café.

El cafe ha sido parte de mi vida por muchos años

“No más café regular”, eso me dijo mi médico cuando le comente de las palpitaciones fuertes que estaba sintiendo en el pecho. Si me conoces sabes que el café es parte de mi vida desde hace muchos años, nunca he hecho ni un mínimo esfuerzo por alejarlo de mi vida porque siento que no podría vivir sin él. 

Me he planteado la idea que tengo una adicción al café muchas veces y mi respuesta siempre es si! Soy adicta pero no me hace daño! Bueno aparentemente se llegó ese día en donde si me está afectando y el doctor me pidió parar de tomar café regular. 

Que difícil dejar algo que estas acostumbrado a hacer! Para mí el café no solo es el tomarlo y sentir que despierto, para mí el café es el olor de la mañana en mi casa, es una plática con una amiga, es terminar una comida en casa de mi mama. 

Así es que pensar dejarlo así porque si me crea tantos conflictos!

Hay dos formas por las cuales uno cambia su estilo de vida y deja sus viejos hábitos, el primero por amor, el segundo por obligación.

Amor fue la razón por la cual yo cambie mis viejos hábitos y empecé a vivir un estilo de vida saludable, estaba embarazada de Greta y por aquellas fechas acababan de diagnosticar a mi papa con Diabetes a sus 50 anos de edad. 

La vida de mi papa cambio y la mía también. 

Tenía 2 meses de embarazo y después de haber leído un libro de epigenética que hablaba de que todo lo que come una mujer embarazada predetermina los genes del bebe y les indica que camino seguir en cuanto a enfermedades congénitas y algo hizo click en mi cabeza.

Ahí en ese momento, por amor a mi primera hija, por amor a mí y a mi cuerpo decidí, tengo que cambiar mi estilo de vida.

Sin embargo la vida de mi papito cambio por obligación, el no tenía alternativa ni tenía opción, tenía que dejar todo lo que estaba enfermando a su cuerpo, tenía que hacer cambios inmediatos, aunque no quisiera, aunque no tuviera ganas. Tenía que hacerlo.

Las dos formas de hacer cambios, por amor o por obligación son válidas y aceptables. Hacer el cambio por amor es más sencillo, hacerlo por obligación requiere más esfuerzo, requiere un compromiso más fuerte. 

En ese punto estoy yo en este momento, tengo que dejar el café regular por obligación, de la noche a la mañana el doctor me pide que lo deje, por mi propio bienestar. 

Ya he hecho esto antes, dejar cosas que sé que me hacen daño, ejemplo el refresco de dieta que antes tomaba diario varias veces al día o el cigarro, el cual también deje hace muchos años. 

No es sencillo, pero si estas en lucha de dejar un viejo habito así como yo entonces déjame darte algunos tips que me han ayudado a navegar estas aguas.

En primer lugar es importante reconocer que este hábito no nos está beneficiando en absoluto. Asegúrate de ser especifico y claro sobre lo que quieres cambiar.

Una vez que hemos identificado esto podemos empezar a trabajar en formas de cambiar nuestro comportamiento.

Encuentra la raíz del problema: Una vez que has identificado el hábito, trata de entender porque lo haces. A veces, los malos hábitos son una forma de lidiar con estrés y ansiedad. Si este es el caso, es posible que debas encontrar una forma más saludable de manejar esas emociones. 

Ahora que reconociste que esto que haces y quieres cambiar no te está haciendo nada bien, visualiza. Cada vez que te sientas tentada a hacer lo que quieres dejar visualiza como te sentirás si sigues haciéndolo y como te sentirías si decidieras tomar una decisión más saludable. 

La perspectiva de sentirte mejor te va a ayudar a tomar mejores decisiones.

Establece metas y objetivos claros, no se trata solo de dejar algo, a mí me ha funcionado más remplazar ese hábito por uno que si me traiga beneficios, por ejemplo cuando deje el refresco me propuse no dejarlo, solo agregar tomarme un vaso con agua antes del refresco, cuando me terminaba el agua la mayoría de las veces me sentía llena y sin espacio para el refresco así es que lo posponía hasta más tarde y así se me iban los días sin tomarlo hasta que finalmente dejo de antojarse.

En resumen, dejar un viejo habito que nos está haciendo daño requiere tiempo y esfuerzo, pero es absolutamente posible!

En mi libro: “Tu mejor versión” hablo precisamente de esto, como puedes encontrar tu propio camino y balance y ser la mejor versión de ti, así es que si tú también estas en ese proceso de cambiar algún viejo habito que no te trae beneficios, te invito a leerlo.

Los mantendré al tanto de mi journey para bajarle el volumen a mi amado café! Se que no estoy sola y muchos de ustedes también están en su propio camino de cambiar algo, me daría mucho apoyo leer cuáles son sus metas así no me siento tan sola! 

Déjame en los comentarios que te gustaría cambiar de tu estilo de vida.

Como siempre, cierro mi blog diciéndote algo positivo, si se puede! Si se puede ya lo hice y lo voy a volver a hacer y si yo pude, créeme TU TAMBIEN PUEDES!

Con cariño. Alexa.

Facebook
Twitter
LinkedIn
Pinterest
WhatsApp

4 Respuestas

  1. Que difícil dejarlo por obligación! Pero nosotros somos dueños de nuestras acciones y saber que lo dejas porque te está causando un mal es lo que te ayuda en tiempos débiles!
    Yo no te tengo ningún consejo pero voy a apoyarte en tomar un poco menos! Te amo tu puedes y siempre has podido!

    1. Somos dueños sin duda, gracias por tu apoyo siempre sis! xoxo

  2. Di lectura tomandome una taza de cafecito! Pero me cayo perfecto leerte porque justo he sentido esas palpitaciones; y claro que tomo mucho cafe en la oficina mañana y tarde….estoy intentado reemplazarlo por una taza de té.

    1. Remplazar siempre sera buena idea en lugar de pensar “dejarlo” y tomar te siempre es buena idea! 🙂

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

SOBRE LA ESCRITORA
Alexandra Anzaldua

Soy Alexa, health coach & mompreneur y he hecho mi misión y parte de mi vida compartir, inspirar y motivar con mi estilo de vida.

PUBLICACIONES RECIENTES
GALERÍA